Por Hou Lulu, Yan Huan y Chen Xiaohang, Diario del Pueblo

Desde que China y Chile establecieran relaciones diplomáticas hace 46 años, Chile ha logrado varios “primeros” en el desarrollo de las relaciones con China: entre otras cosas fue el primer país latinoamericano en firmar un acuerdo de libre comercio con China. Desde que se implementara formalmente el tratado de libre comercio China- Chile en 2006, el comercio bilateral ha aumentado de manera constante, obteniéndose notables resultados de “libre comercio”. Además, el contacto entre los dos países es cada vez más estrecho, y ofrece un enorme potencial para la cooperación.

En 2006, China y Chile decidieron que al 97,2% del total de productos en el tratado de libre comercio bilateral le implementarían una tarifa de cero aranceles durante 10 años. El segundo año de aplicación del acuerdo, la tasa de crecimiento del comercio bilateral entre China y Chile creció un 66,34%, convirtiendo a China en el mayor socio comercial de Chile, posición que continúa a día de hoy.

“En 2015, el volumen comercial entre Chile China era cinco veces superior al de hace diez años. El tratado de libre comercio ha traído enormes beneficios económicos, y ha conducido al desarrollo de las relaciones entre ambos países a una situación de ganar-ganar”, dijo Luis Schmidt, antiguo embajador de Chile en China y presidente de la Federación Gremial Nacional de Productores de Fruta de Chile.

La minería ha sido durante bastante tiempo un área clave de la cooperación económica y del comercial bilateral. Chile es el país con más reservas de cobre del mundo y China es país que más cobre compra a Chile.

“Chile y China tienen economías altamente complementarias, y ambas naciones casi nunca han competido en un mismo campo. Esperamos de todo corazón que el sector industrial chileno pueda ampliar aún más la cooperación y los intercambios bilaterales con China y promover la mejora de las condiciones de vida de sus pueblos”, dijo Pedro Reus, presidente de la Sociedad de Fomento Fabril de Chile.

Chile es uno de los mayores productores de frutas del mundo, uno de los principales países productores de vino del mundo y una importante nación productora de carne de cerdo y aves de corral. La cooperación agrícola se ha convertido en un nuevo punto de crecimiento del comercio bilateral de Chile.

En 2015, el vino chileno entró en el mercado chino con una tarifa arancelaria reducida a “cero”. Con esta política de impuestos, las exportaciones de vino chileno a China crecieron a un ritmo alarmante y actualmente Chile es la segunda fuente de importaciones de vino de China, y también el mayor país de origen de vino a granel en China.

Cada vez más consumidores chinos prefieren la fruta chilena. La alta calidad de la fruta chilena, gracias a la ventaja de la diferencia de temporadas de China y las políticas preferenciales del libre comercio, han hecho que las exportaciones de arándanos, cerezas y otras frutas a China vayan en ascenso. En 2004, las exportaciones de frutas de Chile a China representaban sólo el 0,4% de las exportaciones totales de frutas, y en 2014 aumentaron un 16,6%.

“Con el rápido desarrollo económico de China, un gran número de personas de clase media han comenzado a decantarse por los productos de alta calidad y alimentos ecológicos. La demanda interna china de comida se adapta a la dirección de las reformas económicas de Chile, por lo que la agricultura chilena será una nueva área de cooperación para el desarrollo”, dijo Schmidt.

El ámbito de la cooperación en inversión entre China y Chile tiene un gran potencial. Francisco Silva, presidente del Consejo Bilateral de Negocios Chile-China, dijo que en los últimos años, la inversión china en Chile en agricultura, minería, finanzas y otras áreas ha tenido un crecimiento rápido. China tiene grandes expectativas de inversión en diferentes campos de Chile, y la demanda de inversión en el sector agrícola sigue siendo importante. Esto seguirá beneficiando a ambos pueblos.

“Huawei es una de las empresas chinas tienen una posición firme en el ámbito de la inversión en Chile, y se ha convertido en un pilar del sector de las comunicaciones de Chile”. Reus recomienda a las empresas chilenas que establezcan una comunicación con empresas chinas en el marketing, contratación de trabajadores y intercambio de los empleados con el fin de ayudar a que más empresas se adapten a las condiciones de inversión en Chile, promoviendo así la cooperación en el campo de la inversión entre Chile y China.

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