Por Zhang Mengxu, Diario del Pueblo
（Foto：Zhang Mengxu, Diario del Pueblo）
El 9 de marzo, la Oficina Nacional de Estadísticas de China publicó el índice de precios al consumidor (IPC) y el índice de precios al productor (IPP) de China de febrero de 2017. Los datos muestran que el IPC se redujo un 0,2% en comparación con el mes anterior, pero fue un 0,8% superior al mismo periodo del año pasado; El IPP aumentó un 0,6% en comparación con el mes anterior y un 7,8% superior al mismo periodo del año pasado. Los analistas señalan que en febrero, el IPC continuó en la situación de modesta tendencia al alza del año pasado, y el IPP está mostrando una tendencia de recuperación al alza. En general, la rentabilidad de la economía real continuó mejorando.
Por un lado está la disminución del 0,2% en el IPC. Según Sheng Guoqing, experto en estadística del Departamento de Urbanismo de la Oficina Nacional de Estadísticas, en cuanto a la variación mensual, la temperatura media en el país en febrero es significativamente más alta, el suministro de verduras frescas es adecuado, los precios bajan y, excluyendo los precios de los alimentos y la energía, la tendencia del IPC es relativamente estable. El IPC de enero y febrero aumentó un 1,8% y 2,2% respectivamente, lo que muestra básicamente una continuidad de la leve tendencia al alza del año pasado.
Por otro lado, el IPP aumentó un 7,8%, superó el 7% de las expectativas del mercado. Wang Zhenxia, profesor asociado del Instituto de Estrategia Financiera de la Academia China de Ciencias Sociales, dijo al reportero de Diario del Pueblo que el aumento del IPP lo causaron principalmente dos factores: en primer lugar se debió al efecto del aumento de los precios de productos básicos en el mercado internacional; en segundo lugar, el IPP del año pasado en el mismo periodo era más bajo, y este año ha mostrado una recuperación al alza. Desde el punto de la combinación de ambos índices, desde el tercer trimestre del año pasado, los datos del IPP han mostrado una tendencia al alza, lo que indica que la economía real, en particular, la rentabilidad de la fabricación tradicional está en aumento.
Sobre la preocupación común por la presión de la inflación, Wang Zhenxia cree en desde el punto de vista del IPC, la demanda del mercado tiende a ser estable, y siempre y cuando no existan grandes anomalías económicas, no habrá una presión significativa de la inflación.
Muchos expertos señalan que, desde este punto de la inflación, “es más difícil que se produzca una estanflación económica o estancamiento en China”. Generalmente se cree que el estancamiento económico se basa en tres condiciones principales: en primer lugar, precios altos e inflación alta; en segundo lugar, el desempleo alto; y en tercer lugar, bajo crecimiento económico y estancamiento.
Los datos muestran que en 2016, en China se crearon 13,14 millones de nuevos empleos en ciudades y pueblos, y la tasa de desempleo fue del 4,02%, la más bajo en muchos años. Además, la tasa anual de crecimiento económico fue del 6,7%, la más alta del mundo. Sobre esta base, el mercado en general ofrece buenas expectativas a la economía china de este año, y con ello el estancamiento pierde un punto de apoyo.
Cai Fang, vicepresidente de la Academia China de Ciencias Sociales, dijo que China ha tenido un rápido crecimiento durante más de 30 años, pero el desarrollo ha llegado a un perido determinado, en el que factores como la disminución de la oferta de trabajo en edad laboral, la disminución del ritmo de crecimiento de la productividad laboral y disminución del rendimiento de la inversión, ocultos bajo una tasa de crecimiento baja, hacen que volver a una tasa de crecimiento de alrededor del 10% no es ni realista ni necesario.
“Mantener una cierta tasa de crecimiento, ya sea para la necesidad de mantener la subsistencia o la estabilidad del empleo, es también un eslabón del objetivo de construir una sociedad modestamente acomodada, y un requisito para lograr que en el año 2020, el PIB sea el doble que en 2010”, dijo Cai.